18.6.09

Las palabras y los tonos


Las palabras tienen tono

Conversar es darle entonación a las palabras, palabras que arrastran conceptos

Conceptos con la valija llena de sus idas y vueltas, con su historia

Es cierto que uno escribe pensando en los conceptos aunque los escritores buscan una voz

Buscar una voz

Es más sencillo hablar que escribir con una voz, en el sentido que aquí perseguimos con respecto al tono

También hay melodías, frases buscadas melodiosas, mas bien pertenecientes al género canción

Pero el tono de las palabras significa.

Más allá de la carga conceptual y del diccionario, la palabra dicha, significa.
La entonación otorga significado

Los textos pensados solo para ser leídos, estos es, pensados en la inteligencia de no ser leídos en voz alta, ante un público

_nada impide luego leer cualquier cosa, incluso una formula de composición química de, se me ocurre un champú, sin que se me ocurra ahora de ningún modo algún para qué_

Decimos leer en vos alta, o decir sin más

Decir, al fin y al cabo, más allá de un machete, y más acá, preferiblemente más acá, de la improvisación.

En la política, en el despliegue de su discurso en lo mediático, y, mayormente, en la plaza pública, la palabra, vilipendiada, vaciada, tinellizada, peligrosamente ninguneada, la palabra del político digo, retorna en el tono, en la entonación.

Hay palabras en el lenguaje mismo, más aún, en el lenguaje cotidiano, que su uso, que el uso dado las hace transparentes, invisibles, no digo muertas; esa es otra historia.
Hablo de términos cuyo uso y abuso va corriendo el concepto, va corriendo de lugar en la valija, y hasta va cambiando de bolso, y algunas, apenas si se arrastran en el bolsillito de una carterita

Retomo, disperso_ de eso se trata aquí_ la entonación que da sentido, que recarga los conceptos, que hasta a veces re-nombra a las cosas, ponen en primer plano una voz.
La voz en el político tiene que re-significar a las palabras.
Nuestra voz en el aire intenta apenas discurrir, buscar, jugar.

Modelo

País

Crisis

Gorila

Corrupción

Peronismo

Cómo se juegan esos términos, existe algún modo de salir de un contexto, y una entonación puntual, y siempre desplazada, y siempre referida, y siempre en conflicto?

Tal vez eso, el conflicto es lo que le da vida a un término, independientemente del uso impropio, o desacertado, o remanido que vaya arrastrando tras de sí, en la valija _ en este caso uno imagina una de esas con rueditas, no?_

Por qué una asignación familiar por excluido, y por hijo de cada familia que padeció las consecuencias de esta película macabra que empezó allá con la dictadura terrorista de 1976, siguió con el gorila inepto de Alfonsín, que re-significó e instituyo estructuralmente el gobierno gorila, liberal y eficaz en su desfachatez de Menem, que culminó el gorila pusilánime y asesino de De la Rua , y que justifico el absoluto crecimiento clientelista del aparato de la provincia de buenos aires de Duhalde.

Bien, por qué una asignación que acabe de una vez con el más allá de la línea de pobreza, tiene que ser una propuesta que no salga de un gobierno Peronista?

Qué tono ponerle a esa pregunta?

Las cosas, las palabras, y los tonos

Los conflictos de las palabras son siempre políticos.

El tono de servidumbre de, por ejemplo, los periodistas de América reporteando a su jefe De Narváez, es absolutamente más político que las caras más o menos irónicas del gordito de turno de dichos programemos, ironizando con algún desliz o inseguridad tonal del entrevistado del gobierno nacional de turno.

La mirada y la actitud servil son absolutamente elocuentes gracias al tono, la entonación in-disimulable de estos esclavos.

_Se recomienda ojear la dialéctica del amo y el esclavo de Hegel escrita por Kojeve_

Decimos también que en medio de una batalla tan atroz, tan tremenda como la que se juega en el fondo de esta campaña, no es momento de medir tan finamente los conceptos como con la pregunta recién formulada de la asignación familiar universal, ya que si los aliados son los intendentes del conurbano, intendentes los cuales tienen el absoluto control del asistencialismo, no es un buen momento, éste para exigir aquéllo, en ningún tono.

Ningún tono tampoco hay para darle a ningún concepto que intente explicar al peronismo de la capital, absurdo, inexistente, disgregado, en retirada, que hay que votar a Heller....
Es cierto, en medio de una pelea en la calle cuando lo que esta en juego es saber si retrocedemos una década o no, parecen tonos menores, Heller, asignación universal, reventar las reservas si hace falta, pero, después de todo, luego sí: hacer un poco mejor nuestras vidas.

En medio de una pelea, en la esquina, en la oreja, en la espalda, los golpes duelen, pero el tono del combate no permite medir intensidades, si una te da en el hígado y te deja sin aire y te dobla, no hay tu tía.

No hay que retroceder una década y caer en medio de esa película macabra, pero, tampoco hay que sacar las palabras del conflicto, una semana después de ganar, por los puntos que sean, hay que dar un sentido propio, un tono actual y vital a saber y como modo de ejemplo: si se sientan arriba de la plata, o de la soja, junta nacional de granos, nacionalizar y si joden mucho, expropiarlos!

Asignación universal para la pobreza a la manera nuestra, pero sin falta, cueste lo que cueste, ir a fondo en serio, y seguir en ese tono, ensanchar lo que hay que defender, dar un color propio a las palabras.

Si eso no ocurre, toda la pelea, toda la batalla, todos los golpes recibidos se perderán, una vez más! en el largo tono monocorde de lo que pudo haber sido.....démosle algún valor a la palabra Peronismo, uno que huya rápidamente de los múltiples rellenos a los que fue y es sometido el concepto, y de verdad volvamos a cambiarnos la vida.

O dejemos la palabra en paz, en nuestra enorme y amplia y exquisita y generosa valija de tono variopinto y seductor. Y sí, sí, nacional y popular y bla bla bla.

Tenemos la chance aún de levantar la voz, y de hacer caer todo el peso que la palabra contiene.

Llenémosla

Y luego digámosla, sí, en el tono que prefieras


Bienvenidos.


DL